Redacción El Diario.-
Con pérdida de siete dientes, quemaduras de segundo grado en el rostro fue reportado un estadounidense que además tuvo que pasar cuatro días en el hospital, después de que su cigarro electrónico explotara en su boca.
Andrew Hall de 30 años y residente de Idaho, Estados Unidos, informó a través de su cuenta de Facebook el accidente que sufrió, explicó que permaneció cuatro días hospitalizado mientras médicos le extraían trozos de plástico que quedaron en su boca a consecuencia de la explosión.
«Usé este aparato casi un año y les aseguro que no hice nada que se supone no debía hacer (la batería estaba bien y seguí los pasos que me dieron en la tienda), pero aun así me explotó en la cara”, escribió Hall.
En su perfil asegura que su historia es real y busca que llegue a todas las personas que usan este tipo de aparatos “Sólo quiero sacar a la luz que es posible que exploten sin previo aviso”, finalizó.
