Rogelio Rodríguez Mendoza.-
Poco más de media tonelada de Residuos Peligrosos Biológicos Infecciosos, abandonados clandestinamente en el relleno sanitario municipal de Ciudad Victoria, fueron retirados por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, (Profepa).
En total, sumaron 575 kilogramos de desechos médicos que fueron colocados en siete contenedores con capacidad de 200 litros cada uno, para ser llevados a Altamira donde una empresa autorizada se hará cargo de su destrucción.
La delegación estatal de la Profepa detalló que ubicó los desechos en base a una denuncia anónima.
Entre los residuos figuran jeringas, catéteres, material de curación, vendas y gasas con sangre liquida, y tubos de hemodiálisis.
“Inspectores federales de esta Procuraduría observaron en un montículo de basura común diversas bolsas de plástico, las cuales al ser revisadas se detecto que contenían RPBI no anatómicos, sin detectarse al presunto infractor de esta acción” detallo la Profepa.
De inmediato se procedió al retiro de los residuos con el apoyo de la empresa especializada “Ecotecnologia en Tratamientos, S.A. de C.V.”.
En ese mismo sentido, la Profepa detalló que mantiene vigente un programa de visitas de inspección en unidades de atención médica en todos los municipios del Estado incluyendo Ciudad Victoria, para verificar el cumplimiento de la normatividad ambiental aplicable sobre el manejo y destino de Residuos Peligrosos Biológico-Infecciosos.
Desde enero de 2013 a febrero de 2017, esta dependencia ha practicado 165 visitas de inspección y verificación a igual número de unidades médicas.
En 79 por ciento de las unidades se detectaron irregularidades menores que ameritaron multas por $1.4 millones de pesos, aunque no se realizaron clausuras.
