marzo 29, 2024
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diciembre 14, 2017 | 111 vistas

ESTAMBUL, Turquía, diciembre 13 (AP)

Los palestinos no aceptarán que Estados Unidos juegue ningún papel “de ahora en adelante” en el proceso de paz en Oriente Medio, según afirmó el miércoles el Presidente palestino, después de que el presidente Donald Trump reconociera Jerusalén como la capital israelí.

Mahmud Abás ofreció un discurso en una cumbre en Turquía de jefes de gobierno y altos dignatarios de países musulmanes, en la que se espera acordar una estrategia unificada del mundo islámico contra la decisión de Trump.

Abás calificó la decisión de Trump como un “crimen” que amenaza la paz mundial. El Presidente pidió que Naciones Unidas asuma el mando del proceso de paz y cree un nuevo mecanismo, afirmando que Washington ya no es “apto” para la tarea.

El líder palestino también afirmó que los palestinos están comprometidos con una resolución pacífica del conflicto israelí-palestino, pero que tras el cambio de postura de Trump sobre Jerusalén, ya no se acepta a Estados Unidos como un negociador justo.

El discurso supuso un cambio significativo en la relación de Abás con Estados Unidos, tras años centrándose en la buena voluntad de Washington debido a su papel como único mediador en el conflicto.

Inmediatamente después del anuncio de Trump, la semana pasada, Abás dijo que en la práctica Estados Unidos se había descalificado como mediador, aunque su discurso del miércoles contenía términos más firmes y se pronunció ante un público global.

La cumbre de la Organización de Cooperación Islámica (OIC, por sus siglas en inglés), de 57 miembros, es también una oportunidad para que el mundo musulmán ofrezca su respuesta más firme hasta ahora a la decisión de Washington.

El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, que ahora ostenta la presidencia de la OIC, instó a los países a reconocer de forma urgente el estado palestino con Jerusalén como su capital.

Erdogan ha sido una de las voces más críticas con el gesto de Trump. En una comparecencia en la cumbre, dijo que Israel es un estado invasor y un “estado terrorista”.

La situación de Jerusalén es una pieza central del conflicto israelí-palestino, que se ha prolongado durante décadas, y el gesto anunciado por Trump el seis de diciembre se interpretó de forma generalizada como que Estados Unidos tomaba partido por Israel. También despertó el temor a un repunte de la violencia, ya que otras crisis en torno a Jerusalén han desencadenado enfrentamientos.

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