PALM BEACH, Florida, EE.UU. (AP) – El presidente Donald Trump acusó el miércoles al gobernador de California de «tratar de retirarse de la Guardia Nacional en la frontera».
El gobernador demócrata Jerry Brown ha dicho que está a punto de llegar a un acuerdo para que el estado se convierta en una gran escala de elementos de la Guardia Nacional a lo largo de la frontera con México, como lo planeó Trump.
La oficina de Brown dijo el martes que no había cambiado desde que el gobernador prometió la semana pasada 400 soldados de la milicia nacional y que California está esperando una respuesta a su propuesta, que busca que se cierre la prohibición de cualquier actividad relacionada con la aplicación de la ley de inmigración.
Trump tuiteó el miércoles por la mañana que los californianos «no están contentos. Quieren seguridad y protección ¡AHORA!».
Asegurar también que hay una «Revolución» en el estado y que hay «áreas demasiado desamparadas como Santuario para el que está exento de este concepto ridículo, infestado de delitos y de procreación».
El martes, la junta de supervisores del condado de San Diego votó a favor de que se respaldara una demanda presentada por el gobierno federal en contra de la ley del estado que permite establecer las «ciudades santuario» para inmigrantes.
El condado de San Diego es fronterizo con México y tiene más de 3 millones de habitantes.
El gobierno estatal se ha posicionado como el líder nacional en la resistencia a las medidas antiinmigrantes del gobierno de Trump. Los líderes californianos han condenado las redadas masivas, las deportaciones, los planos de erigir, un muro en la frontera con México y la política, seguido por el actual secretario de Justicia, de «tolerancia cero», con los intelectuales, cruzaron el límite ilegalmente para ingresar a los Estados Unidos.
