Llegó el día tan esperado por todo México, la Selección Mexicana se presenta en el Mundial de Rusia 2018 y su gente sabe que el apoyo es primordial y las más de 20 mil personas que están en tierras mundialistas se hicieron sentir por todas las calles.
La capital rusa fue una sucursal de cualquier ciudad de la República. Playeras verdes, banderas y sombreros de charro le dieron color a una sede que hasta ahora ha tenido poco ambiente y que los mexicanos supieron ponerle sabor.
El ‘Cielito Lindo’ retumbó por cada uno de los vagones del metro, y los gritos de “México, México” lo acompañaron en todo momento. La ilusión está viva, el ambiente es extraño como si el destino le tuviera algo preparado a esta afición que suele dejarlo todo por acompañar a su selección en todo momento.
La explanada del Estadio Luzhniki fue una completa locura, si bien aquí ya hubo más personas con playeras de Alemania estos se vieron intimidados por la impresionante ola verde que erizó a más de uno la piel.
Moscú es verde, Moscú es de México y solo falta que este ingrediente se mezcle con un buen partido del Tricolor para que ese pastel llamado victoria se pueda consumir y se proclame a la capital rusa la ciudad en la que los milagros existen, el lugar en el que se apareció un guerrero azteca y derrotó al gendarme alemán.
