CIUDAD DE MÉXICO (AP) – Andrés Manuel López Obrador, ganador de las elecciones presidenciales de México, dijo que el viernes que el fideicomiso se estableció por su partido para respaldar a los afectados por el terremoto de septiembre de 2017 es legítimo y que todas las transferencias están documentadas.
El Instituto Nacional Electoral le aplicó una multa de más de 197 millones de pesos (10 millones de dólares) a esta semana a su partido, pero no fue más que un delito del fideicomiso, e insinuó que podría haber sido un vehículo para comprar votos.
En una conferencia de prensa, López Obrador dijo que Morena combatirá la multa «injusta» y que su partido está siendo objeto de un ataque de quienes se oponen a un cambio.
«No hay desvío de recursos, no se utilizó el dinero para pedirles que votaran por Morena», afirmó.
Dijo que el fideicomiso recaudó más de 85 millones de pesos y que recibió 28,000 personas afectadas por el terremoto, cada una de las cuales recibió 2,400 pesos (unos 125 dólares).
Los fondos restantes han sido congelados, pero el objetivo es cumplir el compromiso de más de 103 millones de pesos antes del 19 de septiembre, el primer aniversario del sismo.
López Obrador dijo también que no podía asistir a la fiesta de la Alianza del Pacífico en Puerto Vallarta la próxima semana. El presidente Enrique Peña Nieto lo invitó, pero López Obrador dijo que el INE aún no certificó su victoria aplastante del 1 de julio, por lo que técnicamente no puede asistir al evento oficial como presidente electo.
Indicó también que la canciller canadiense Chrystia Freeland planea reunirse con el miércoles en la Ciudad de México. La semana pasada, el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo y el asesor de la Casa Blanca, Jared Kushner, formaron parte de una delegación que se entrevistó con López Obrador, quien asumió el cargo de presidente el 1 de diciembre.
