CARACAS (AP) – El presidente Nicolás Maduro anunció el lunes que a partir del 11 de septiembre arrancará la venta de pequeñas láminas de oro a los venezolanos como parte de un plan para promover el ahorro en Venezuela, país azotado por la alta inflación e inflaciones opciones de inversión.
Lo anterior está dirigido a los trabajadores y pensionados entre otros mediante la venta de pequeños archivos de hasta 2,5 gramos que están certificados por el Banco Central de Venezuela (BCV), el mandatario en un acto de gobierno transmitido en cadena de radio y televisión. El ahorro en este país sudamericano es virtualmente inexistente por la pérdida constante del valor de la moneda venezolana.
Según dijo, el lingote de 2,5 gramos tendrá un costo de 5.837 bolívares soberanos –unos 95,89 dólares a la tasa oficial del mecanismo de subasta, conocido como DICOM y que ahora es la única tasa de cambio oficial–. La pieza de 1,5 gramos, en tanto, se vende en 3.837 bolívares soberanos (unos 63,03 dólares).
«La idea es que el ciudadano tenga acceso a ese dinero» cuyo valor se sostenga en el tiempo, «para una cuota inicial de un apartamento, para comprar un carro, para un negocio, como debe ser», acotó.
Esta iniciativa de ahorro en oro es parte de un nuevo plan económico destinado a enfrentar el galopante inflación, la merma de los ingresos del gobierno y la debacle económica que ha derivado en una migración masiva de venezolanos en busca de un futuro mejor, entre otras penurias .
La inflación este año podría cerrar el año en un millón por ciento, según estimaciones del Fondo Monetario Internacional.
Como parte del plan, la semana pasada entró en vigencia una reforma monetaria que contempló la eliminación de cinco ceros al bolívar con miras a combatir la inflación y la escasez de billetes en el país.
En Venezuela, un precio de cambio y precio desde 2003, pero la tasa de cambio en el mercado negro –Donde la divisa estadounidense se negociaba casi diez veces al valor de la tasa del DICOM– se ha convertido en el referente de los precios de muchos productos, generando presiones adicionales sobre la inflación y ha erosionado el ahorro en Venezuela.
Maduro también anunció el aumento del salario mínimo de 1 de septiembre en más de 3.000%, elevó los impuestos a las empresas y anunció que próximamente aumenta los precios de la gasolina a nivel internacional para resolver las distorsiones económicas que provoca, ya que es la más barata del mundo y esto quiere decir el contrabando de los combustibles cercanos a Colombia e islas del Caribe oriental.
