Las uñas postizas son de esas cosas de la vida cotidiana que puedes amar u odiar, pero como en todo, tienen un delicado límite entre lo agradable y lo totalmente grotesco.
Y no estamos hablando del largo o del color usado en ellas, esto va bastante más allá, pues desde hace un tiempo se pusieron de moda diseños extravagantes que van desde las «uñas muela», hasta las que incluyen una bailarina de pole dance o un mosco muerto.
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Pero la última creación en este sentido rompió todas las barreras y ha causado controversia. Consiste en encapsular una hormiga viva dentro de cada uña.
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Aunque la empresa que las creo asegura que «no se lastimó a ningún animal» en este experimento, usuarios de redes sociales se mostraron molestos y en contra de que se utilice seres vivos para estos fines.
