Rogelio Rodríguez Mendoza.-
Cd. Victoria, Tam.- Tamaulipas tendrá cada año, en diciembre, una Semana estatal en contra de la Corrupción, durante la cual todas las instituciones públicas deberán desarrollar actividades que involucren a la sociedad en la lucha contra ese mal.
Así lo determinó este miércoles el Pleno del Congreso del Estado, al aprobar una iniciativa de decreto que presentó el diputado del Partido Acción Nacional (PAN), Hilario González García.
La Semana Estatal contra la Corrupción se desarrollará en la semana que tenga verificativo el Día Mundial de la materia, que es el nueve de diciembre.
El Pleno Legislativo consideró loable la acción legislativa porque
la corrupción es un fenómeno social al que gran parte de la sociedad lo considera uno de los principales problemas por erradicar en el país, al grado de situarla a la par de la inseguridad.
“La eficiencia gubernamental, como factor de desarrollo político de toda sociedad estatal, debe estar plenamente libre de corrupción, y ello ha sido una premisa y una constante de esta Legislatura. De ahí que la implementación del Sistema Estatal Anticorrupción haya sido uno de los temas prioritarios en nuestra agenda legislativa”, detalló el dictamen respectivo.
Los diputados reconocieron los esfuerzos que se hacen en Tamaulipas para combatir la corrupción pero estimaron fundamental que la sociedad coadyuve en esa tarea.
“En Tamaulipas gracias a la reforma constitucional y legal que se implementó con relación a este renglón, podemos afirmar que estamos trabajando para combatir la corrupción y que gracias a ello cada vez es más difícil permear a las instituciones como sucedía en otros tiempos. Sin embargo somos coincidentes en que este tipo de acciones contribuyen a generar una cultura afín al compromiso que tenemos, tanto el Gobierno como la propia sociedad, haciendo equipo…”, refirieron.
Y añadieron: “Sin lugar a dudas, esta acción legislativa viene a contribuir a la evolución de la buena práctica pública y a la construcción de tiempos con menor corrupción, ya que ningún país puede estar a salvo de la misma, dado que constituye un mal que siempre está presente, en mayor o menor medida, en un gobierno, pero que es obligación de este mismo realizar las acciones necesarias para ponerle fin, por lo que esta premisa vela por ello”.
