abril 25, 2024
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febrero 25, 2019 | 458 vistas

José del Carmen Perales Rodríguez.-

Cd. Victoria, Tam.-
La falta de empleo, de inversión pública y por ende la caída en el circulante en la Ciudad, además de la inseguridad, son considerados los principales factores que han ocasionado el cierre, en algunos casos temporal y definitivo en otros, de al menos 180 establecimientos formales de todos los tamaños.

En lo que se refiere a las pequeñas empresas familiares, principalmente de comida, cuya cifra es más dinámica y por tanto difícil de cuantificar, pues de acuerdo con organismos empresariales los cierres están a la par de las aperturas, situación contraria a los llamados  “changarros” o tiendas de la esquina, que han esquivado las crisis.

“El parámetro que nosotros tenemos de empresas en la Ciudad es el padrón de afiliados, el más reciente corte nos indica una reducción de alrededor del siete por ciento, que representa aproximadamente 180 socios que por alguna razón no han refrendado su afiliación”, expuso Juan Carlos González Alanís.

El Presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) local añade que la estadística de otros giros, como el gastronómico y las pequeñas tiendas de abarrotes o misceláneas, se mantienen, porque su economía es soportada por los ingresos de otros sectores sociales.

“Las tiendas pequeñas o ‘changarros’ no son afectados por la recesión, sobreviven, pese a los altibajos; por otra parte, lo que vemos es que en los restaurantes grandes no se ha tenido mucho impacto en lo que se refiere a cierres, salvo los alrededor de cinco que en 2017 fueron afectados por la inseguridad y que desafortunadamente ya no volvieron a abrir”, comentó.

Sin embargo, González Alanís señaló que los pequeños establecimientos de estos giros son los menos afectados, porque la mayoría son empresas familiares que no tienen qué pagar sueldos y tampoco otras obligaciones patronales, como seguridad social.

“En general lo que vemos es que son muy notorios cierres y una prueba es la calle Hidalgo, donde de un mes a otro pueden cambiar las cosas y despertarnos un día con nuevos comercios establecidos cerrados, como la semana pasada en que dos zapaterías comenzaron su proceso de cierre”, concluyó.

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