marzo 28, 2024
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mayo 18, 2019 | 104 vistas

José del Carmen Perales Rodríguez.-

Cd. Victoria, Tam.-
Con o sin reforma o contrarreforma, con o sin evaluaciones, la calidad de la educación y la prestación de este servicio no está en riesgo y no debe preocupar a los padres que esta nueva etapa represente un retroceso en la formación de sus hijos, aseguró Miguel Angel Tovar Tapia.

El presidente de la Sociedad Estatal de Maestros y Padres de Familia de Tamaulipas, agregó que, por el contrario, el retorno de la tranquilidad y certeza laboral seguramente reforzará el compromiso de los docentes con la sociedad.

«La cancelación de las evaluaciones a los docentes no representa en sí la esencia de la demanda de los mismos, como sí lo fue la garantía de la permanencia, que dependía de lo establecido en la Ley General del Servicio Profesional Docente», comentó.

Tovar Tapia recordó que dicha ley contemplaba un nombramiento definitivo en lo que se refiere a nuevos ingresos y ascenso, sin embargo, precisó, este es un término jurídico muy distante de lo que es basificación, que no existía en esa legislación.

«Ese era el punto neurálgico en el que la ley chocaba con la preocupación en común del magisterio: perder la permanencia y la basificación, ahora con la nueva contrarreforma, se supone que no se va afectar la permanencia», señaló.

El docente apuntó que, aun sin evaluaciones, van a seguir las capacitaciones, pero también que los beneficios que tenían antaño sigan vigentes, en lo que se refiere principalmente a los ascensos, aunque consideró que no deben quitarse todos los candados.

«Existe la buena voluntad de que el Estado sea el rector de los recursos humanos del sistema educativo y ahora los ascensos serían por escalafón, como las claves de directivos o supervisores, sin embargo, antaño fuimos testigos de que muchas claves se otorgaron sin que las personas estuvieran inscritas en ese sistema, se corre ese riesgo», advirtió.

Finalmente, Tovar Tapia confió que en este tema: «se establezca un mecanismo que garantice el éxito del esfuerzo de las maestras y maestros por ascender vía escalafón y que no se otorguen claves nada más por compromiso o cualquier otro tipo de situaciones, que lo haga el Estado pero con supervisión del sindicato, pero este último solo para salvaguardar los derechos de los agremiados».

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