Carlos Santamaría López, de tan solo 13 años de edad, fue aceptado en la máxima casa de estudios superiores de México, siendo así, el alumno más joven en recibir clases en dicha institución.
Pero no todo fue fácil para el menor, ya que como él cuenta, recibía calificaciones injustas por el simple hecho de no tener la edad promedio de un alumno.
Todo el semestre se me había venido dando calificaciones injustas, (en la materia de Álgebra) y digo, bueno no quiero sacar esa calificación, voy a hacer el examen final y me ponen cero; entonces hago la segunda vuelta y me ponen el mismo examen en el que saqué cero, y pregunto en qué me equivoqué, por qué saqué cero, entonces (la suplente del profesor titular) empezó a decirme que yo no tenía por qué estar ahí, que, porque era un niño y que los niños no van a la universidad, bla, bla, bla. Todo era así, calificaciones injustas o una mirada fea
Antes de estos percances, un profesor de la coordinación de Biología Celular, lanzó una campaña de desprestigio hacia el alumno, para cuestionar su capacidad académica, en respuesta, Carlos decidió mantenerse al margen de cualquier tipo de problema.
En cambio, su padre Fabián Santamaría, presentó una denuncia ante el Séptimo Tribunal Colegiado en materia administrativa, presentando como argumento, la forma en que los directivos de la institución trataban a su hijo.
Consecuencias
El pasado 22 de agosto el tribunal colegiado, determino que es imperativo reparar los daños en el entorno sico-social del alumno, tomando, en caso de ser necesario, terapias y una disculpa pública por parte de los agresores.
Además, de crear nuevos procedimientos tanto académicos como administrativos para casos de alumnos menores de edad, con talentos “extraordinarios” y su adaptación en la universidad.
Por el momento solo han sido amonestados, tanto el profesor de la coordinación de Biología Celular y se emitió una sanción hacia la suplente del profesor de Álgebra.
Ahora mismo, Carlos cursa su segundo semestre en la UNAM, con la mentalidad de que el es el primero de muchos niños que como el, tienen grandes habilidades.
La UNAM no es la única universidad en la que ha estado
En medio de todo el acoso por parte de la UNAM, decidió probar suerte en España, como invitación de la vicerrectora de la Universidad de las Islas Baleares.
De España no se llevó una experiencia distinta ya que como el mismo comenta:
Vimos que el sistema español no era lo mío. Nadie cuestiona nada de lo que dice el profesor y por ejemplo en la UNAM en una clase a una maestra se le olvidó ponerle una R a una ecuación y le dije ‘le faltó la R y dijo ah cierto’, pero en España si en el proceso le falta la R va sin R y si se equivocó todo el mundo se tiene que equivocar
Con información de: Excelsior.com.mx
