abril 26, 2024
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noviembre 26, 2019 | 368 vistas

Rogelio Rodríguez Mendoza.-

Cd. Victoria, Tam.-
El campo de Tamaulipas ya padece las primeras consecuencias de la reducción del Presupuesto Federal para el 2020, porque los bancos e intermediarios financieros han suspendido los créditos a los productores.

“Hay mucha incertidumbre entre los intermediarios financieros y en los bancos por la política agropecuaria del Gobierno federal y a causa de ello no están dando créditos”, denunció Agustín Hernández Cardona, presidente de la Unión Regional Agrícola del Norte (Uran).

Dijo que la consecuencia de lo anterior es que muchos productores no han podido preparar sus tierras para el ciclo de siembra Otoño-Invierno 2019-2020, que inicia el 20 de diciembre y termina el 15 de marzo.

“Muchos de nosotros nos apoyamos tradicionalmente en intermediarios y bancos para adquisición de insumos que nos permitan sembrar las tierras. Nos dan créditos que luego pagamos con los subsidios del Gobierno, pero ahora ante los recortes al presupuesto para el campo no nos quieren apoyar, porque no hay certeza de que podamos pagarles”, explicó.

Hernández justificó la decisión de bancos e intermediarios financieros porque también ellos necesitan asegurar la recuperación del dinero y bajo las condiciones actuales no hay certeza de ello.

La desconfianza de quienes prestan dinero se agrava más porque desde el año pasado hay miles de agricultores que han caído en cartera vencida, precisamente porque el Gobierno federal comenzó a retrasar el pago de subsidios como el de ingreso objetivo.

“Hay muchos compañeros que ya han sido enjuiciados y hasta les están embargando algunos bienes para garantizar el pago”, indicó.

Dijo que el riesgo para Tamaulipas es que se queden sin sembrar miles de hectáreas programadas para el ciclo Otoño-Invierno.

“El programa de siembra es de 750 mil hectáreas, de las cuales 650 mil son de sorgo, pero definitivamente muchas no podrán ser sembradas porque sus propietarios no tienen recursos económicos para ello. Lamentablemente esa es la realidad y una de las primeras consecuencias de la errónea política agropecuaria del Gobierno federal”, mencionó.

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