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diciembre 27, 2019 | 144 vistas

CIUDAD DE MÉXICO, diciembre 19 (Notimex)

El boxeo mexicano vivió un 2019 histórico gracias a Andy Ruiz Jr., quien contra todos los pronósticos sorprendió al mundo para ser el primer campeón de peso completo de su país, un sueño del que sufrió un duro despertar.

Andy, nacido el once de septiembre de 1989 en Imperial Valley, California, pero de padres mexicanos, logró un hecho histórico el uno de junio de 2019, cuando venció por nocaut técnico al británico Anthony Joshua para proclamarse campeón de peso completo de la AMB, OMB y FIB.

El pugilista, quien solo hizo las primeras tres peleas de su carrera en México, aprovechó el positivo de Jarrell Miller para pedir a través de su cuenta de Instagram una oportunidad contra Joshua, quien se había quedado sin rival.

Así, con seis semanas por delante se concretó su oportunidad para el uno de junio en el Madison Square Garden de Nueva York, preparación que incluso le valió para estar en Las Vegas el fin de semana del cinco de mayo, donde ofreció una rueda de prensa.

Desde ese día el “Destroyer” mexicano ya irradiaba confianza rumbo a su pelea en busca de hacer realidad un sueño, el cual se vio frustrado en 2016, cuando perdió con Joseph Parker en Auckland por el cetro pesado OMB.

Y así llegó la noche del uno de junio en la llamada “Meca del boxeo”, donde Anthony era amplio favorito para acabar con el “gordito” mexicano, quien dio una de las más grandes sorpresas del boxeo.

 

ANDY SE LEVANTA DE LA LONA PARA NOQUEAR

Con 21 triunfos en su carrera, 20 por la vía del nocaut, Joshua mantuvo a distancia en los primeros asaltos al mexicano con su jab, y en el tercer rollo lo mandó a la lona con una izquierda que se estrelló en el rostro del “azteca”.

Cuando todo parecía acabado para él, sacó fuerzas, nadie sabe de dónde, para en ese mismo asalto derribar dos veces a Joshua, algo que parecía impensable, aunque la campana sonó para salvar al entonces campeón.

Andy no desaprovechó el momento y era quien lucía más motivado, aunque los dos ya habían probado su poder de puños y tuvieron que ser más precavidos, pero en el séptimo asalto todo se terminó para el campeón.

Una lluvia de golpes provocaron la tercera caída para el inglés, incrédulo por lo que vivía sobre el ring, pero eso poco importó a Ruiz Jr., quien no lo dejó vivir y lo llevó a las cuerdas para provocarle otra caída y dejarlo en malas condiciones.

El réferi se dio cuenta y detuvo la pelea para que se concretara una de las mayores sorpresas de los últimos 20 años en el mundo del boxeo, comparada con James “Buster” Douglas, quien noqueó al estadounidense Mike Tyson en 1990 en Tokio, Japón.

La victoria lograda por Andy Ruiz causó impacto en muchos lugares del mundo, pero sobre todo en México, donde el pupilo de Manny Robles fue recibido como un héroe.

Fue recibido por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en Palacio Nacional; ofreció una conferencia de prensa ante decenas de medios de comunicación y volvió al lugar donde comenzaron muchos de sus sueños, el Comité Olímpico Mexicano.

 

VIVE DURO DESPERTAR

Ya con los títulos en su poder, el pasado nueve de agosto se confirmó la revancha con Joshua, ahora en la Diriyah Arena de Riad, Arabia Saudita, para la cual lucía más que motivado el mexicano, sobre todo porque tendría el tiempo suficiente para hacer un campamento completo, a diferencia de la primera pelea.

Pero la fama y los millones que ganó en la primera pelea impidieron que la misma fuera la esperada. Fiestas, comerciales y otras situaciones provocaron que interrumpiera sus entrenamientos, lo que al final le pasó factura.

Aunque en algunas fotografías lucía con un mejor físico respecto a la primera pelea, el día del pesaje en Riad todo cambió, pues llegó más pesado que en la primera pelea y con más de 20 kilos de diferencia respecto a Joshua.

El siete de diciembre, en su primera defensa, Andy Ruiz Jr. se vio falto de velocidad y nunca pudo conectar a Joshua, quien ganó de forma categórica por decisión unánime para recuperar los títulos de peso completo y terminar con el sueño del mexicano.

Al término de dicha contienda Andy reconoció que su preparación no fue la adecuada, pero pidió completar la trilogía con Joshua, seguro de que la preparación ahora sí sería la óptima para acabar con su rival y recuperar sus títulos.

Las críticas llovieron al “Destroyer”, quien pese a todo dejará su nombre en los libros de historia del pugilismo mundial como el primer campeón de su país de peso completo, en espera de que pueda retomar el camino y se mantenga en la élite del boxeo.

 

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