Rogelio Rodríguez Mendoza
Cd. Victoria, Tam. – Para lograr mejores resultados en la depuración de las corporaciones policiales es necesario actualizar y fortalecer el proceso de evaluación de control de confianza, advirtió la organización no gubernamental “Causa en Común”.
Para ello, planteó tres acciones que deben implementarse en busca de mayor eficiencia en las pruebas evaluatorias.
Una de ellas es aprovechar la información obtenida de las entrevistas con los policías para implementar estrategias de conductas indebidas, y para mejorar las condiciones laborales y físicas del personal.
Para ello, señaló, es necesario que haya mejor comunicación entre los centros de evaluación y las Secretarías de Seguridad Pública.
Otra acción a emprender sería la de diseñar un programa de acompañamiento para los policías que no aprobaron la evaluación por alguna causa no grave.
Por ejemplo, aquellos elementos que registren deficiencias, físicas o psicológicas, podrían someterse a un programa que les permita revertir esas fallas para que permanezcan en activo.
La tercera acción sería implementar un programa de reclutamiento y profesionalización, para disponer previamente de elementos disponibles que vengan a reemplazar a quienes deben ser dados de baja por no aprobar el proceso de evaluación de control de confianza, por representar un peligro para la corporación.
Adicionalmente a lo anterior, “Causa en Común” expuso la urgencia de fortalecer cada una de las cinco fases de que consta la evaluación.
Para la fase psicológica demandó incorporar nuevas herramientas, como pruebas psicométricas más actualizadas, en tanto que en el examen toxicológico deben aprovecharse nuevas tecnologías para tener resultados más eficientes y en menor tiempo.
En relación con el polígrafo, es una necesidad el ajuste al instrumento, con softwares y tecnologías más avanzadas.
Esto es importante porque, por ejemplo, en otros países se monitorea el comportamiento de las pupilas de los evaluados para saber si están diciendo la verdad.
En la investigación socioeconómica recomendó considerar visitas de campo para observar al elemento en operación.
La ONG expuso también la necesidad de difundir entre los policías la importancia de la evaluación, porque muchos se resisten a ella al considerarla como un mero pretexto para darlos de baja.
“Existe resistencia por parte de los policías, la cual se relaciona con la percepción que tienen sobre la evaluación, pues normalmente la asocian con un proceso de depuración en el que los evaluadores son ‘los verdugos’”, detalló.
