Un curioso caso se dio en el estado de Texas, Estados Unidos, cuando un perro tuvo que ser operado debido a que se comió el pay de su dueña, solo que se lo tragó con todo y tenedor metálico incluído.
La dueña de esta mascota, Carli Ott, señaló que estaba compartiendo un pastel de calabaza con su perro de 4 años llamado Chemo, cuando repentinamente el canino engulló la pieza junto con el tenedor de metal que sostenía ella.
Carli lo trasladó a la clínica veterinaria Big Thicket, a las afueras de Cleveland, donde una radiografía reveló el tenedor en el sistema digestivo del glotón Chemo.
Los médicos veterinarios lograron extraer exitosamente el cubierto con cirugía y ahora Chemo se recupera de la operación.
Con información de: www.ayojon.mx