marzo 28, 2024
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marzo 14, 2020 | 83 vistas

Diego López Bernal.-

Cd. Victoria, Tam.-
Además de la creciente violencia que sufren las mujeres tamaulipecas, las condiciones económicas y sociales han estado lejos de mejorar en los últimos años para contrarrestar la brecha de género que enfrentan.

Los avances fueron irrelevantes durante la década de 2008 a 2018, según informes del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) presentados en el documento “Pobreza y Género en México: hacia un sistema de indicadores”.

Datos como el que indica que el número de  jefaturas femeninas de hogar creció, independientemente de su condición de pobreza, de 25 a 30 por ciento permiten ver el contexto en el que crece cada día el movimiento feminista mexicano.

En dicho contexto económico, el Coneval reporta que a 2018 “alrededor de la tercera parte del ingreso corriente monetario de los hogares correspondió a aportaciones de mujeres, tanto en contextos de presencia y ausencia de pobreza”.

Sin embargo, esto se da a pesar de la brecha salarial que nada avanzó en la década de referencia, pues en la población sin pobreza las mujeres recibieron 90 pesos por su trabajo por cada cien pesos que percibieron los hombres.

Asimismo, en contextos de pobreza la brecha crece, ya que las mujeres obtuvieron 73 pesos por cada cien pesos respecto de los hombres, lo que las pone en franca desventaja para atender solas al 30 por ciento de los hogares mexicanos y aportar un tercio de los ingresos en las familias, en lo general.

 

Y ENCIMA LA VIOLENCIA CRECIENTE

En medio de esta adversidad, la incidencia delictiva que afecta directamente a las mujeres crece conforme pasan los años, como lo reconociera la coordinadora de la Mesa de Seguridad y Justicia en Victoria, Josefina Acuña Guzmán.

“En cuanto a delitos, el que nunca nos ha bajado y que nos preocupa es la violencia familiar, que continúa al alza”, confirmó a El Diario tras ser consultada sobre el hecho de que hay meses en los que las denuncias por este delito son incluso mayores a los robos.

Por ejemplo, durante el bimestre enero-febrero de 2019 las carpetas de investigación abiertas por las autoridades locales de Tamaulipas fueron mil 29, mientras que el presente año ascendieron a mil 42, en tanto que las denuncias de abandono por pensiones alimenticias muestra una ligera baja, pues pasó de 296 el año pasado a 247.

Y mientras las mujeres marchan, protestan y encuentran nuevos foros de expresión, siempre en condiciones de desigualdad, un dato para las tamaulipecas, que confirma la autenticidad de su clamor, es el que presenta las limitadas estadísticas actualizadas: en enero se abrieron cuatro casos de feminicidio en la entidad, cuando durante el 2019 el primero ocurrió en marzo, sumando solo once el año pasado.

Por último, echarle un vistazo al abuso sexual en Tamaulipas también corrobora que en medio de una abierta brecha de género la violencia las acecha cada vez más: En enero de 2019 se presentaron 39 denuncias por abuso sexual mientras que el mismo mes, de este año, la cifra se incrementó a 49.

Todos los datos de incidencia delictiva aquí presentados corresponden a las estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública y de la Fiscalía General de Justicia del Estado.

 

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