Tras los enfrentamientos sucedidos el pasado sábado entre policías y manifestantes, más de cien personas han sido detenidas en Londres, quienes se congregaron porque decían que querían proteger las estatuas, según informó la policía.
Los oficiales fueron atacados con botellas, latas y todo tipo de objetos cortantes en una violenta jornada en la zona gubernamental de la capital, donde se encuentra el Parlamento.
La policía Metropolitana de Londres señaló que al menos 15 personas, entre ellas dos policías fueron heridos y seis de hospitalizadas, muchos de los activistas de extrema derecha se encontraban borrachos al momento de congregarse en la capital británica argumentando defender estatuas de personalidades de la historia británica.
Algunos activistas de ultraderecha al grito de “Inglaterra” arrojaron botellas, latas y patearon a los agentes.
Boris Johnson, primer ministro británico, tuiteó que el vandalismo racista no tiene lugar en las calles y que cualquiera que ataque a la policía recibirá el peso de la ley.
Por otra parte, Keir Starmer, líder de la oposición laborista, señaló que la violencia contra la policía es totalmente inaceptable y agregó que las protestas fueron lideradas por aquellos que tienen la intención de causar violencia y sombrar odio para conseguir sus fines.
Priti Patel, ministra británica del Interior, también condenó los actos del pasado sábado y recordó que el coronavirus todavía es una amenaza.
Por otro lado, la policía ha impuesto restricciones en Londres para evitar incidentes, ordenando abandonar las concentraciones alrededor de las 16:00, lo que muchos no cumplieron.
También se les ha pedido a los manifestantes que no se sumen a las protestas ante el riesgo de propagar el coronavirus y la dificultad de mantener la sana distancia.
Con información de: heraldo.es
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