abril 26, 2024
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noviembre 3, 2020 | 162 vistas

Rogelio Rodríguez Mendoza.-

Cd. Victoria, Tam.-
El muro fronterizo que se construye en la orilla del Bravo, en la zona sur de Texas, va a alterar el cauce del río y, en caso de registrarse fuertes precipitaciones, va a provocar inundaciones en las ciudades fronterizas de Tamaulipas, desde Nuevo Laredo hasta Matamoros, pasando por Miguel Alemán y Reynosa, alertaron especialistas.

Además, la construcción del muro que hace Tommy Fisher, avalado por Donald Trump, está violando el tratado de aguas del 1944 “y las autoridades mexicanas no hacen nada, no reaccionan por esa acción”, acusó Raúl Quiroga Álvarez, experto en temas hidráulicos.

Tommy Fisher es el inversionista que decidió construir su propio muro fronterizo privado (con el que simpatiza Donald Trump) en el sur de Texas, y en las márgenes del Bravo que, se hace sin autorización de la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA), tanto del lado americano como mexicano.

“El muro no va a contener la venida del agua y nos la va aventar hacia lado mexicano y ese es el tema, va a inundar poblaciones hasta Miguel Alemán y se tendrían que ver niveles y si bien es una opinión ligera, sin duda que se puede presentar”, indicó.

Quiroga Álvarez refirió que la construcción del muro en terrenos privados y que están casi en la orilla del caudal, al darse una inundación, la estructura no solo puede desvanecer, se convertirá en un tapón que va a enviar el agua hacia el lado mexicano.

En el lado americano, los ingenieros consultados advierten que la estructura tiene mal cimientos, consideran necesario desmantelarla y Fisher tiene ya una línea de demandas por esta obra.

“De por sí Reynosa tiene esos lugares alrededor que se inundan con facilidad, ahora con un muro que esté prácticamente enviando el agua hacia el lado mexicano, se va a generar un caos”, indicó Quiroga.

Propuso que la parte mexicana de la CILA envíe una nota de protesta a la de Estados Unidos, tratando de hacer ver el problema que se puede generar por esa situación, a pesar de haber perdido una demanda ante un juez federal quien, permitió al grupo Fisher hacer el muro.

La gran pregunta ahora es qué pasará la próxima vez que el río Bravo sufra una gran inundación, lo que ocurre periódicamente con los huracanes del Golfo.

Quiroga Álvarez reconoce que existe un bordo de protección en la cuenca del Bravo para proteger de inundaciones a las ciudades fronterizas, bordo que existe tanto del lado mexicano como de Estados Unidos. “El de México está muy deteriorado, el de Estados Unidos está perfectamente conservado”, aseguró.

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