abril 24, 2024
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noviembre 27, 2020 | 88 vistas

José del Carmen Perales Rodríguez.-

Cd. Victoria, Tam.-
Padecimientos como fibrosis pulmonar, afectación en nervios periféricos, disminución de los sentidos del olfato y gusto, así como agravamiento de males renales, figuran entre las principales secuelas que les quedan a los pacientes que han superado al covid-19, reveló el doctor Herminio Rodríguez Hinojosa.

El especialista en medicina interna y jefe de esa área en el Hospital Regional de Alta Especialidad (HRAE), advirtió que si bien la sociedad tiene presente que se trata de una enfermedad que puede ser mortal, la realidad es que el grupo poblacional más afectado son los adultos mayores.

«Después de que un paciente es dado de alta la mayoría tienen secuelas, entre las que están los problemas con el pulmón, principalmente, porque se inflama y queda como una cicatrización que se llama fibrosis pulmonar», expuso.

Explicó que esto ocasiona que si antes el pulmón difundía el oxígeno a un 80 por ciento de forma que una persona podía caminar y hacer otras actividades físicas, después de esta inflamación queda con una capacidad más baja.

«Por ejemplo las personas ya no pueden subir escalones como antes, sí pueden comer, platicar y otras cosas, pero la falta de aire se presenta en cuanto hacen mucho ejercicio y eso tiene remedio», detalló.

Rodríguez Hinojosa dijo que también en algunos casos afecta los nervios periféricos, que son los que le dan fuerza a los brazos y las piernas, ocasionando que ya no pueden cargar las cosas como antes.

«Otra secuela es que se les quita el sabor y algunos también pierden la capacidad de oler las cosas porque el nervio que va a la lengua y la nariz también es afectado, lo más grave es el pulmón, pero también agrava los problemas renales», advirtió.

En este contexto, el especialista dijo que se está ante una enfermedad muy difícil de curar porque todavía no hay un tratamiento efectivo, pero lo que les preocupa es que este virus ataca más frecuentemente a pacientes de edad avanzada.

«Estos pacientes por lo regular tienen su cuerpo ya cansado, su pulmón con menos funcionalidad y eso es lo que les ocasiona la falta de oxígeno, muchos pacientes han salido adelante, pero no podemos asegurar que todos se van a curar, por eso hay una defunción muy alta todavía», finalizó.

 

 

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